Según los datos revelados por la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental, los costos derivados de actos de corrupción en México alcanzaron una cifra alarmante de 11,910.6 millones de pesos el año pasado, una vez ajustada la inflación. Este monto representa un aumento significativo en comparación con años anteriores y refleja la persistencia de este grave problema en la sociedad mexicana.
El análisis detallado de la encuesta muestra que el costo promedio por cada persona afectada por la corrupción fue de 3,368 pesos, lo que supone un aumento del 25.6% con respecto al año anterior. Sin embargo, a pesar de este incremento, se observa una disminución del 27.1% en comparación con los valores registrados antes de la pandemia en 2019, lo que sugiere un impacto continuo de la crisis sanitaria en el comportamiento de la corrupción.
Se atribuye este aumento en los costos de la corrupción a un incremento del 16% en el volumen de trámites, pagos y solicitudes de servicios gubernamentales durante el período de reducción de la contingencia sanitaria. Este hallazgo subraya la necesidad urgente de implementar medidas efectivas para combatir este flagelo y garantizar la transparencia y la integridad en todas las esferas del gobierno mexicano.